Se trata del único hotel vertical de la isla, el cual combina el estilo rústico mexicano con el diseño contemporáneo, sin olvidar el confort. Está perfectamente integrado en la naturaleza y crea un entorno refrescante y confortable para sus huéspedes. El hotel, con su concepto básico contemporáneo, ofrece una atención acogedora y personalizada, además de un lugar ideal donde descansar sin olvidar la diversión y el disfrute de la naturaleza. Se trata de un hotel de playa, remodelado en 2008, que dispone de vestíbulo con servicio de salida y recepción 24 horas, así como de 16 habitaciones luminosas y confortables, que incluyen 8 habitaciones básicas individuales/dobles y 8 habitaciones triples/cuádruples. Asimismo, está dotado de caja fuerte, servicio de cambio de divisas, guardarropa, cafetería, tiendas, bar, restaurante, conexión a Internet WiFi, servicio de lavandería, almacén de bicicletas y aparcamiento.