Pésimo servicio de limpieza de habitaciones... aunque bonito hotel

hola! la primera impresión por la excelente ubicación del hotel y el bonito edificio que nos encontramos dejó paso a una sensación de perplejidad cuando menos al comprobar la descoordinación del hotel en cuanto al servicio de limpieza y preparación de las habitaciones. la primera habitación que nos asignó el recepcionista aún ni siquiera la habían empezado a limpiar (y eran ya más de las dos y cuarto...); la segunda que nos asignó, además de estar en las mismas condiciones que la anterior, tenía el "agradable" añadido de que no le funcionaba la cisterna... imagínense... a la tercera fue la vencida: una amplia habitación, con vistas a las catedrales, pero tres cuartos de hora más tarde... el desayuno de la mañana siguiente, continental, suficiente. un bonito hotel nada recomendable hasta que no solucionen el problema del servicio de limpieza de habitaciones.

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