Bueno pero ...

Acabamos de llegar de estar 4 días en el hotel. lo mejor del hotel la situación muy cerca, como su nombre indica, del triángulo del arte, especialmente del reina sofía a 2 minutos a pie. la habitación cómoda, amplia y el baño no está tampoco mal, con la salvedad del suelo con unas marcas y manchas algo feas, impropio de un 4 estrellas. destacar de manera positiva que tienen carta de almohadas para elegir dureza y material (latex, visco, etc...) no lo usamos pues las que habían en la cama eran suficiente mente cómodas, pero lo quería destacar. por terminar con la habitación la tele grande y buena. en recepción muy rápidos a la entrada y a la salida y además con servicio de consigna al salir lo cual se agradece. pero algo que no me ha gustado nada es el desayuno, me explico. para nosotros que siempre viajamos al menos con desayuno es este un punto fundamental, quería primero decir que zumos naturales y el café no del todo mal, pero no se puede dejar de reponer y este es un punto fundamental porque sino para que ofrecer si lo disfrutan los muy madrugadores. y no será porque no les insistí a los que atendían el comedor, muy aplicados en recoger, pero muy poco diligentes en reponer. desde la falta de lonchas de jamón serrano, escasez de pan, ni os cuento de la parte dulce, solo uno de los cuatro días disfrutamos de un mini donut de chocolate, las mini tartas idem, una pena la verdad. eso sí para los guiris siempre los huevos revueltos muy calentitos, salchichas, bacon, etc.... así que qué pena por este lado, ah y por cierto el día que más tarde bajamos a desayunar 1 hora antes del cierre, lo digo para evitar suspicacias. la limpieza diaria y correcta. no repetiría.

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