Contemporáneo de diseño de interiores utilizando telas de alta calidad y madera dura. En el lugar, un restaurante de primera categoría, bar y jardín de cerveza en la terraza en verano, un lujoso spa y gimnasio. Un hotel que no cumple expectativas.
No recomendaría este hotel porque: - la limpieza en las habitaciones es inexistente; hacen la cama pero no pasan aspiradora, ni limpian la bañera, etc. esto sin cntar con las telas de araña que había por toda la habitación. - solo tiene un ascensor y si se estropea tienes que ir por la escalera (con maleta inclusive). a mí me tocó la quinta planta, y sólo me ofrecían que subiese un chaval a ayudarnos con 2 maletas que pesaban más que él... - la comida del buffet de desayuno es escasa y poco variada. además el servicio es muy lento y nada amable. desde luego no fue para nada lo que esperaba de un hotel de 4 estrellas en munich. mucha fruta gratis y wifi en la habitación pero quiero poder ducharme sin que me den nauseas. necesita claramente una reforma.
Cerrar