El hotel, con un elegante estilo de construcción típico de su época, se inauguró en la víspera de la navidad del año 1950 y mantiene aún el espíritu de esos años. El lobby del hotel es amplio y abierto por lo que su vista y acceso directo a la playa son inigualables. Edificio sólido, con las suaves líneas del trópico. Es una estructura compacta de seis niveles, con 162 habitaciones y bellos e incomparables jardines. Además, ofrece un bar, aparcamiento, un club infantil y servicio de lavandería (con cargo extra). En el aspecto gastronómico consta del restaurante ""Antillano"" que sirve desayuno, almuerzo y cena tipo buffet; el restaurante ""Universal"", para cenar especialidades internacionales; el restaurante ""Italiano"", con platos italianos para cenar y el cabaret "Continental", el cual ofrece excelentes cenas y un colorido espectáculo con ritmos que van directamente al corazón, en un ambiente de nostálgico sabor.